Manchas de fruta
En ropa de algodón: agua, unas gotitas de amoníaco y agua oxigenada. Estamos hablando de ropa de colores claros, porque el agua oxigenada puede aclarar colores oscuros.
En ropa de lana: bicarbonato de sodio disuelto en agua y lo aplicamos en la mancha con un cepillito de dientes. Recordemos antes sacar los restos con un papel absorbente, para no ampliar la mancha.
En las telas oscuras y tapizados: agua, limón y leche caliente. Enjuagamos y si es necesario, volvemos a insistir.
