Compost o compuesto orgánico
El compost lo podemos hacer nosotros y nos ayuda a aprovechar todo o casi todo; el bolsillo y las plantas agradecidos.
Compost o compuesto orgánico, lo que SÍ podemos poner
Hay elementos básicos para prepararlo y lo podemos hacer con lo que tenemos en casa:
– Cáscaras de huevo
– Cáscaras de frutas y verduras
– Borra de café
– Restos de comida (sin aceites ni grasa, porque atraen ratas, cucarachas, etc.)
– Cenizas de estufas o parrillas después de preparar un asado. Muy importante por su aporte de potasio.
– Pasto cortado, se pone en capas alternando con el resto de los elementos.
– Podas de plantas y arbustos, cortados en ramas chicas. Es ideal para alternar con el resto de compuesto porque permite la aireación que se necesita. El aire apura la buena formación del compost.
– Hojas y flores que recogemos del jardín, cortar más chicas para no demorar el proceso.
– Aserrín y lajas de madera.
– Paja y heno.
Tip: El contenedor debe de ser grande para que el compost sea fácil de trabajar y mover. Puede ser un tacho grande de basura, un tanque o barril de plástico.
Compost o abono orgánico, lo que NO podemos poner
– Plantas enfermas o apestadas
– Carne, espinas o esqueletos de pescados
– Cama de gatos, las piedritas
– Materia de las mascotas, es por los parásitos que esta contiene.
– Pañales y elementos de plástico, no se desintegran.
– Revistas o folletos que contienen pegamentos, pinturas y colores tóxicos.
– Carbón que contiene petroquímicos.
Tip: Una vez que el compuesto esté pronto tenemos que probar si realmente lo está, tomando un poco con la mano, debe tener un color oscuro y su textura debe de ser como de grasa espesa.